sábado, 29 de noviembre de 2008

Por tierras aragonesas...

La semana pasada subimos a Jaca de nuevo. Esta vez la excusa era el cumpleaños de Guille, cumplir 30 años no se hace todos los días. Realmente no necesitamos excusa para ir a Jaca aunque siempre nos proponemos una. Sabemos que en el fondo el corazón nos los pide, esa es la verdadera justificación. Como es tradición tradamos una cuantas horas en llegar a Jaca, previo paso por Zaragoza para recoger (secuestras) a Martita la maña. Salimos de Madrid a eso de las 9 de la mañana y llegamos a las... llegamos simplemente. Hay cosas que exigen mucho tiempo pero también el resultado es grato. Cena en familia, la que ha formado Guille entre amigos suyos de tierras mañas, madrileñas y demás... una pequeña incursión por la noche jacetana para tomar contacto y a dormir para prepararnos para la excursión del día siguiente.
Al final no pudimos hacer las rutas con raquetas de nieve pero la alternativa fue una vueltecita por un valle (del que no recuerdo el nombre) en el pre-Pirineo.


Vuelta a Jaca, olor a residuo perruno en el coche nuevo de Vicen, cafelito y a empezar la tarde-noche de un sabado de una forma que hacía tiempo que no practicaba. Nos fuimos a un polideportivo donde jugamos al baloncesto, pin-pon, badminton y un poquito de rockodromo y de vuelta casa Guille a cenar y a prepararnos para noche de desenfreno... bailes típicos y homenajes a los grandes (James Brown... en el sentido de romper mis rodillas contra el suelo)... fiestón de aupa.

A la mañana siguiente? una pequeña expedición comandada por los crapulas de siempre se fueron a tomar la ciudad... sus cervezas, sus pinchos... clásico... comida en familia madrileño-aragonesa y comienzo de las despedidas. Unos a Madrid, otros a Zaragoza y otros a Hecho, a buscarnos la vida por allí. Sitio chulo...ñieeeeeeeeeehhhhhh!!!!!!!!! Nevada de aupa y como alternativa a ruta campera? visita al señor alcalde de Sieso, David, a conocer como vuelve la vida a un pueblo abandonado del pre-Pirineo. Mucha calidad humana y buen sabor de boca.
De vuelta a Madrid y soñando con volver a repetir viaje a tierras baturras.
A esperar a que el corazón nos lo pida.