Las cosas tienen diferentes visiones según la persona que las observe. Todo depende del cristal con que se mire. Un dibujo como el que muestro, ciertas personas lo pueden considerar un sombrero. Pero en realidad, esto se trataba, en su momento, de un elefante tragado por una boa. Si, estoy hablando de "El principito" de Saint-Exupery. He empezado a releermelo. Recuerdo que lo lei de pequeño y algunas que otras imagenes se me quedaron grabadas, como este dibujo o los baobabs. También durante años oi muchas veces que no se trataba de un libro solo para niños sin con mensaje de calado entre los ya más creciditos. Así que he decidido, buscarlo por casa entre las pilas de libros y ver como sienta leerlo después de... quizás 20 años o más. Pues de momento las ojillas que he leido me han sentado muy bien. La verdad es que tienen mensajes muy bonitos, más bellos ahora que se pueden entender mejor las cosas que en un tiempo en el que las preocupaciones en principio eran más simples. Cuando el protagonista se encuentra por primera vez al principito, este le pide que le dibuje un cordero, y puesto que aquel no es muy habil dibujando y el principito es un poco impaciente, el protagonista le dibuja una caja y le dice que el cordero que quiere esta en su interior. El principito esta encantado porque es justo el cordero que quería. Buscar en el interior de las cosas nos puede llevar a encontrar lo que queremos a pesar de que el envoltorio no siempre sea ni el más atractivo o ni el que esperabamos. Hay veces que hay que dejarse llevar por los sueños y por lo que nos gutaria ver. La imaginación al poder, que decían jovenes idealistas hace justo 40 años en la primavera de mayo del 68. Sigamos teniendo sueños, a pesar de que traten convencernos de muchas maneras para que los perdamos, los sueños no son solo para los niños sino para todo el género humano. Salud
miércoles, 21 de mayo de 2008
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